CARTA DE LECTORES
Nº 147 Gobierno Ciudad
Publicada en La Nación como Salvar el árbol el 15-10-13
La noche del día 2 de octubre me encontré por
primera vez sobre Cuba, con un contenedor negro inexplicablemente estacionado a
pocos cm de un arbolito joven que se esfuerza por crecer, no obstante los golpes
que los fines de semana le causa el camión que traslada los elementos de los
feriantes. Justamente me toca ver cómo el que recoge los residuos lo golpea dos
veces más, al subir y luego al bajar, el contenedor.
Hago notar al personal que lastima al vegetal, pero me explican que
ahí lo puso el Gobierno de la Ciudad y que no lo puede correr. Por lo que
alrededor de las 22 hs llamo al Nº 147, donde me derivan a Higiene Urbana y explico la situación.
Perseverante, vuelvo a llamar a las 21 hs del día 3, y efectivamente tenían
registrado mi reclamo.
El viernes 04-10-13 me desocupé más
temprano, y al comenzar mi paseo me
encontré con alegría, con que el contenedor estaba colocado a casi metro y medio
del arbolito en cuestión. “Te salvé”, pensé en mi interior.
En fin, que el 147 funciona y que cuesta muy
poco, poner de nosotros para hacer de este en que vivimos un mundo mejor y más justo para seres vivos
vegetales, animales o humanos.
Alejandra Belmartino
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María Silvia: Felicitaciones prima, el que no se queja, que no se queje.
Y otros, a todos, gracias. Cuesta tan poco tratar de hacer bien y de subsanar el mal...
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MI OPINIÓN SOBRE BERGMAN CRITICANDO A ELISA CARRIÓ
Qué lástima, sería mejor que los políticos exhibieran calidades y logros para conquistarnos y no que denigraran a los contrarios. Estamos consados del estilo patoteril, autoritario, de los narco K. Opinión en Blog El país que queremos.
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RESPONDO A SANTIAGO D, sobre cuáles serían mis problemas personales.
Santiago D:
En realidad, no tengo quejas de la vida, siempre
fui libre hice lo que quise, pasé por diferentes etapas y las disfruté todas
apreciando lo bueno y tolerando lo malo. Fui maestra de primaria 2 años,
azafata 8, esposa y madre otros 8, luego volví a trabajar y me separé, trabajé
en la actividad inmobiliaria que me encantó, todos mis trabajos me gustaron y
fueron disfrutados, además de que en todos me fue muy bien. Mientras trabajaba
(casa comida chicos perros trabajo y estudio, todo un record) estudié derecho,
me recibí a los 45 años de abogada, y comencé a ejercer la profesión. La
historia está en el blog, quiénes somos.
Mis hijos 2 varones, cambiaron el CASI y el OLIVOS
RUGBY CLUB por RIVER PLATE. Pensé que allí se promovía la vida sana y el
deporte, pero no, resultó que entre otras cosas, se traficaba. Por su origen
educación estilo de vida, cuando los culparon de un homicidio (el de Gonzalo
Acro), muchas cuestiones no me cerraban. Soy ultracuriosa y necesitaba entender
intelectualmente qué estaba pasando. Así involuntariamente fui conociendo
hechos que denotaban que tal como pensaba no tenían relación con el hecho ni
estaban en el lugar en que se produjo la muerte.
Comenzaron represalias tales como amedrentamiento,
amenazas, tiros, muertes, a la gente que se acercaba, etc. que me hicieron
comprender que había algo más serio y grave que un falso testimonio producto de
amenaza de muerte, y que prisión de inocentes que se saben ajenos a un hecho
determinado.
Luego entendí que había alguna relación con
efedrina; que la que los testigos llaman mafia de River, estaba asociada con el
gobierno, que muchos jueces conocían de delitos de la organización y no
aplicaban a ellos el derecho. Poco después advertí que otros carteles presionaban
al que estaba aliado al gobierno, para que extendiera la impunidad judicial a
sus ilícitos bajo apercibimiento de alguna represalia … Y sentí que en ese
marco se encuadraba la muerte de Gonzalo Acro. Reuní alguna prueba que costó
persecuciones y sangre para quienes la trasladaban.
Me costó reponerme de esa etapa de los años
2008 /2009, que me llevaron a conocer un
submundo de instituciones corruptas (justicia policía etc que no funcionaban
como debían) y de delincuencia de gente con poder, que no sabía ni remotamente que
existía. Fue muy duro entender que no había estado de derecho, ni sistema
representativo, ni justicia, ni instituciones. Más aún para una abogada.
En fin que el tiempo comenzó a sanar las heridas
del alma que parcialmente, subsistirán
mientras viva, porque me tocó ver mucho mal causado a centenares, innecesario e
inútil. Ej: Matar a alguien para
quitarle un papel del que hay 20 copias, es decir, para amedrentar o exhibir
poder e impunidad. Más con la tecnología que hay hoy, ya casi no se pueden
guardar los secretos.
Cuando Bergoglio fue elegido Papa, y comenzó a
predicar, sumado a que ya comenzaba a difundirse el caso Báez, sentí que era el
momento de poner por escrito lo vivido; no era justo que me llevara ese
conocimiento a la tumba, porque son centenares los damnificados y los burlados
por las instituciones, decenas los muertos. Sin contar los miles o cientos de
miles que entran en la droga y se dañan y nos dañan a diario. No quiero ser
parte de ese mundo, ni seguir encubriéndolo y callando. Creo que es importante
que las instituciones que quedan en pie, tomen conciencia de la situación,
subsanen los males y vean el modo de prevenirlos para que no se repitan. Y en
este punto me encuentro ahora. Cumplí mi parte, mi conciencia está tranquila.
Hice lo que debía. Lo demás me es ajeno. No soy Dios.
Me gusta mi trabajo y lo disfruto aunque estoy
bastante desilusionada de la justicia que no existe. Y ello resulta obvio
cuando analizamos hacia el pasado. Todo queda en la nada, IBM, Skansa, Aduana
paralela, Valija de Antonioni, Patrimonio Presidencial y otros enriquecimientos
inexplicables, Shoeklender, Jaime, Báez, efedrina. No me parece justo que
alguien esté privado de libertad porque robó, y que quienes nos gobiernan y
juzgan trafiquen, armen causa falsa a testigos para desacreditarlos, dañen y maten y sean impunes.
Esta es mi historia. No hay fantasmas, ni más dolor
que el de saber cuántas vidas se dañaron en un intento infructuoso de ocultar
lo inevitable: Que la verdad quedara a la vista. Que la mafia de River y el
Gobierno eran socios en el narcotráfico y delitos varios para ocultarlo y que
además contaban con mafia judicial anexa para garantizarse impunidad. Fue una
inmensa desilusión comprender que no había nada de aquello en lo que creía,
estado de derecho, sistema republicano, etc No uso teléfono por razones obvias
para cualquiera que haya leído el blog.
Saludos. Alejandra.

