Buenos Aires, 11 de Mayo de 2014
Violencia versus Lealtad
Agradezco a la Conferencia Episcopal que nos induzca a
tomar conciencia de la realidad. El 8 de Noviembre de 2013, advirtió que el
narcotráfico no pudo prosperar en el tiempo, sin la connivencia del poder
político, judicial y policial. Ahora destaca la violencia social, dato objetivo indiscutible.
Los gobernantes parecen más interesados
en valores materiales como enriquecerse o ampliar su base de poder, que en
perseguir el bien común o desplegar valores superiores del hombre (ética,
honestidad, eficiencia, solidaridad).
El kirchnerismo de 2003 sembró odio y dividió para
gobernar. Enarboló los derechos humanos, que luego violó (remito al blog que
lleva mi nombre). Macri ayuda a Cristóbal López a evadir a impuestos; en lugar de
controlarlo, y destinar los fondos que podría recaudar por el juego, a educar,
capacitar en oficios y profesiones a los que menos tienen, para incorporarlos al
trabajo digno. Y así mejorar también la seguridad.
Muchos jueces son leales a los
poderosos, que los acercan al poder y al dinero, y no a las normas que nos
rigen. Encubren delitos graves de sus pares. Como dice la Iglesia de algunos profesionales, usan ”las
formas del derecho” para desactivar causas de los gobernantes y amigos del
poder. Condenan a los pobres o a los perejiles elegidos como chivos expiatorios,
cuando no a inocentes…
La consecuencias de un SISTEMA CORRUPTO
que ya no proporciona paz social están a la vista: Mano propia y VIOLENCIA.
Hay un remedio casero muy sencillo pero
infalible, que se suma a la Misericordina de Francisco, y se llama LEALTAD. Pero
no con el dinero y con el poder, sino LEALTAD con el ESTADO DE DERECHO, con las
normas que nos rigen, que incluyen la igualdad ante la ley; con el SISTEMA
REPRESENTATIVO republicano, la división de poderes y el bien
común.
Alejandra
Belmartino