Justicia en Santa Cruz
En mayo de 2003, luego de casi doce años de gobierno en Santa Cruz, el kirchnerismo había dejado señales muy claras de lo que se venía. A la expulsión ilegal del doctor Sosa del Poder Judicial -incorruptible magistrado que iniciaba una investigación relacionada con el desconocido destino de los más de mil millones de dólares percibidos por la provincia por el pago de regalías petroleras-, se le sumó el posterior incumplimiento de las seis sentencias de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, que ordenaron su reincorporación. Es interesante mencionar que, como medida previa, el oficialismo se había asegurado el control y el vergonzoso silencio de la Asociación de Magistrados y Funcionarios, institución que se convirtió así en un larvado antecedente de Justicia Legítima. A esto le sumamos las burdas y permanentes descalificaciones públicas a los muy pocos funcionarios independientes, como las sufridas por el valiente fiscal Andrés Vivanco.
La reforma de la Constitución provincial para instaurar la reelección indefinida mediante una inconstitucional consulta popular, procedimiento que fue calificado como nazi por el doctor Zaffaroni ("Llamar a una consulta para reformar la Constitución es utilizar los mecanismos de la democracia plebiscitaria a fin de establecer una relación tramposa entre el líder y el electorado, a la manera del nazismo") y el nombramiento del doctor Zannini, principal político oficialista y carente de antecedentes jurídicos, como presidente del Tribunal Superior de Justicia, son parte de otras tantas burdas maniobras en contra de la independencia de la justicia en la provincia de Santa Cruz. Si le agregamos el copamiento del Poder Legislativo con el esquema de "diputados por pueblo" y la persecución a los pocos medios de prensa independientes, tendremos los fundamentos palmarios del infinito desprecio por los principios básicos de la organización republicana que, lamentablemente, no fueron tenidos en cuenta oportunamente.
Marcos Oliva Day
Ex fiscal del Juzgado de Puerto Deseado-Santa Cruz.
