sábado, 30 de mayo de 2015

DE LA ADICCIÓN CREMATÍSTICA Y DE LOS GOBIERNOS ADICTOS AL PODER Y EL DINERO, EN PUEBLOS CON MUCHEDUMBRES DESNUTRIDAS, POBRES Y SIN VIVIENDAS. POR EMILIO FRANCHI ROUSSEL


 Adicción Crematística
 
Crematística: conjunto de conocimientos acerca del manejo del dinero

Dr. Emilio Franchi Roussel, franchiro@gmail.com,  29, mayo, 2015


Desde el comienzo de su vida intrauterina, el ser humano es una criatura que conoce, se adapta y acostumbra al parasitismo de su fuente de nutrición y crecimiento: su  madre.  Al instante de nacer y colapsar o cortar el cordón umbilical se produce el primer destete por le desprendimiento de la placenta, su “primer pecho”

Al nacer, se adhiere a los nutricios pechos maternos. Demanda tiempo para la madre y la criatura concretar el destete (sería el segundo). Habitualmente toda criatura destetada se apega a diversos objetos, de nombre “transicionales”: el chupete, el osito peluge, una frazadita, una prolongación o una trenza de pelo materno, etc.

Estos antecedentes confirman la disposición adictiva de todo ser humano. A medida que crece es común su adicción a: tabaco, bebidas (alcohólicas o gaseosas), café. Pero el abanico de adicciones humanas es amplio: a otro ser humano, a instituciones, a grupos de adolescentes, a otros grupos, a hinchas deportivos o a “barras bravas”, individuos subsidiados que holgazanes son mantenidos por ciertos gobiernos o municipios, al juego (ludo-adicción) al poder político perpetuo, sea como dirigente de un estado como de otras organizaciones (profesionales, sindicatos, gremios, etc.) a los patrimonios ilimitados (en enormes casas con excesivo confort, servidumbres, coleccionistas de automóviles, veleros, etc.).

Aquí, es necesario destacar la “adicción-crematística” cuando la ilimitada acumulación de dinero, oculto bajo la tutela de testaferros o tesoros en cajas de seguridad, adquieren tal magnitud que es evidente su imposibilidad de consumirlos en una vida.  Esta adicción, mas allá de juzgarla como avaricia, es oportuno destacar su actitud “ególatra-centrípeta” que indiferente o ignorante excluye las necesidades básicas de extensas poblaciones

Hace fuerte y deshumanizado contraste el poder crematístico del adicto con las muchedumbres desnutridas y pobres, sin viviendas, sin educación, sin coberturas para su precaria salud. Esto adquiere suma gravedad toda vez que se descubre y conoce en gobernantes de cualquier país y cultura.  En la actualidad esta deshumanizada adicción fue confirmada en los dirigentes del fútbol, en sus instituciones de la FIFA y de la AFA, expuestas al proceso paulatino de juzgamiento que recién comienza.

Tortuga

Tortuga

Ballena

Ballena

Delfin

Delfin

Pato

Pato

Pura

Pura

Playa

Playa