CARTA AL PAÍS
Marchas a la Plaza y códigos
mafiosos
El análisis minucioso que desde mi reflexión
surge de la reciente movilización política en Plaza de Mayo, con el insólito
remate de Máximo Kirchner, me habría gustado conversarlo con el papa Francisco,
aprovechando sus conocimientos profesionales de químico y teólogo y erudito en
miserabilidades humanas. Sin embargo, recordé el libro “Crónicas mafiosas”, de
Joan Queralt, y de ahí extraje este pensamiento: “Las mafias se nutren y
fortalecen de la perversión democrática y de la pérdida de valores éticos de la
sociedad”. Y continúa: “Una sociedad que acepta sumisa la metástasis de la
corrupción, diluye las fronteras que la diferencian del mundo criminal y
contribuye a la creación de un nuevo espacio de ambigüedad en el que valores
como justicia, verdad o legalidad, pierden significado para adquirir un
inquietante pensamiento mafioso”. Le preguntaría al Papa qué pecado genético
padecemos para tener que sufrir tanto castigo.
Francisco
Loiácono
loiaconolocane1@aol.com